Enfermería: Cuidados Humanizados, v14(1)
enero-junio 2025
10.22235/ech.v14i1.4428
Artículos originales
Eficacia de la terapia de presión negativa en la reducción de complicaciones de heridas posquirúrgicas: una revisión sistemática
Effectiveness of Negative Pressure Wound Therapy in Reducing Postoperative Complications: A Systematic Review
Eficácia da terapia por pressão negativa na redução de complicações de feridas pós-operatórias: uma revisão sistemática
Gabriela Aracelly Guaraca Pumacuro1 ORCID:
0000-0003-0696-3708
María Marlene Chisag Guamán2 ORCID: 0000-0002-0481-2378
1 Universidad Técnica de Ambato, Ecuador
2 Universidad Técnica de Ambato, Ecuador, mm.chisag@uta.edu.ec
Resumen:
Introducción: Las complicaciones en heridas
postquirúrgicas, como infecciones, seromas y dehiscencias, representan un
desafío global en salud. La terapia de presión negativa (TPN) es una técnica
avanzada que acelera la cicatrización mediante presión subatmosférica controlada,
reduciendo el riesgo de infecciones y promoviendo la regeneración tisular.
Objetivo: Profundizar en la eficacia de la TPN en la reducción de
complicaciones posoperatorias y mejorar los resultados clínicos en diversos
contextos quirúrgicos.
Metodología: Se realizó una revisión sistemática basada en la guía
PRISMA. Se consultaron las bases de datos PubMed, Scopus, Web of Science,
SciELO, LILACS, Redalyc, Dialnet, ScienceDirect, Medigraphic y Ciberindex. Se
utilizaron descriptores DeCS y MeSH como: “negative pressure wound therapy”,
“wound healing”, “surgical wound infection”, “postoperative complications” y
sus equivalentes en español, combinados mediante operadores booleanos AND y OR.
Se incluyeron estudios publicados entre 2017 y 2024, en inglés, español y
portugués.
Resultados: Los artículos analizados evidenciaron que la TPN reduce
significativamente la incidencia de infecciones (35 % en comparación con
métodos convencionales) y dehiscencias (30-40 % menos). Los factores
determinantes para el éxito de la TPN incluyen la localización, el tipo de
cirugía y características individuales como obesidad, diabetes y edad avanzada.
Conclusiones: La evidencia indica que la TPN es una intervención eficaz
para reducir complicaciones posquirúrgicas, especialmente infecciones y
dehiscencias, en pacientes con heridas complejas y comorbilidades. Los estudios
muestran mejoras consistentes en los tiempos de cicatrización y en los
desenlaces clínicos en cirugías de alto riesgo.
Palabras clave: terapia de presión negativa para heridas; complicaciones posoperatorias; cicatrización de heridas; herida quirúrgica; infección de la herida quirúrgica.
Abstract:
Introduction: Postoperative wound complications,
such as infections, seromas, and dehiscence, represent a global health
challenge. Negative Pressure Wound Therapy (NPWT) is an advanced technique that
accelerates wound healing through the application of controlled subatmospheric
pressure, reducing the risk of infection and promoting tissue regeneration.
Objective: To analyze the effectiveness of NPWT in reducing
postoperative complications and improving clinical outcomes in various surgical
contexts.
Methodology: A systematized review was conducted following the PRISMA
guidelines. The following databases were consulted: PubMed, Scopus, Web of
Science, SciELO, LILACS, Redalyc, Dialnet, ScienceDirect, Medigraphic and
Ciberindex. DeCS and MeSH descriptors were used, including: “negative pressure
wound therapy,” “wound healing,” “surgical wound infection,” and “postoperative
complications,” along with their Spanish equivalents, combined using Boolean
operators AND and OR. Studies published between 2017 and 2024 in English,
Spanish, and Portuguese were included.
Results: The reviewed studies demonstrated that NPWT significantly
reduces the incidence of infections (by approximately 35 % compared to
conventional methods) and dehiscence (by 30-40 %). Key success factors include
wound location, type of surgery, and individual patient characteristics such as
obesity, diabetes, and advanced age.
Conclusions: The evidence suggests that NPWT is an effective
intervention for reducing postoperative complications —particularly infections
and dehiscence— in patients with complex wounds and comorbidities. The studies
report consistent improvements in healing time and clinical outcomes,
especially in high-risk surgical procedures.
Keywords: negative pressure wound therapy; postoperative complications; wound healing; surgical wound; surgical wound infection.
Resumo:
Introdução: As complicações em feridas
pós-operatórias, como infecções, seromas e deiscências, representam um desafio
global em saúde. A terapia por pressão negativa (TPN) é uma técnica avançada
que acelera a cicatrização por meio de pressão subatmosférica controlada,
reduzindo o risco de infecções e promovendo a regeneração tecidual.
Objetivo: Aprofundar na eficácia da TPN na redução de complicações
pós-operatórias e melhorar os resultados clínicos em diversos contextos
cirúrgicos.
Metodologia: Foi realizada uma revisão sistematizada com base nas
diretrizes do PRISMA. Foram consultadas as bases de dados: PubMed, Scopus, Web
of Science, SciELO, LILACS, Redalyc, Dialnet, ScienceDirect, Medigraphic e
Ciberindex. Utilizaram-se descritores DeCS e MeSH como: “negative pressure
wound therapy”, “wound healing”, “surgical wound infection”, “postoperative
complications” e seus equivalentes em espanhol, combinados por meio de
operadores booleanos AND e OR. Foram incluídos estudos publicados entre 2017 e
2024, em inglês, espanhol e português.
Resultados: Os artigos analisados evidenciaram que a TPN reduz
significativamente a incidência de infecções (35% em comparação com métodos
convencionais) e deiscências (30–40% a menos). Os fatores determinantes para o
sucesso da TPN incluem localização, tipo de cirurgia e características
individuais como obesidade, diabetes e idade avançada.
Conclusões: As evidências indicam que a TPN é uma intervenção eficaz
para reduzir complicações pós-operatórias, especialmente infecções e deiscências,
em pacientes com feridas complexas e comorbidades. Os estudos mostram melhorias
consistentes nos tempos de cicatrização e nos desfechos clínicos em cirurgias
de alto risco.
Palavras-chave: terapia por pressão negativa para feridas; complicações pós-operatórias; cicatrização de feridas; ferida cirúrgica; infecção da ferida cirúrgica.
Recibido: 26/12/2024
Aceptado: 28/04/2025
Introducción
La incidencia de complicaciones en heridas posquirúrgicas es una preocupación a nivel mundial en el ámbito de la salud. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 11 % de las intervenciones quirúrgicas en países desarrollados resultan en infecciones del sitio quirúrgico (ISQ). (1)
En América Latina, la prevalencia de ISQ puede ser aún mayor, con tasas reportadas de hasta el 11.2 % en algunas regiones especialmente en países de bajo y mediano ingreso (2). Un estudio de enfoque cuantitativo, de diseño observacional realizado en un hospital-clínica en la ciudad de Guayaquil en Ecuador, con una muestra de 19 pacientes, identificó las complicaciones posquirúrgicas más frecuentes, en las que destacan la infección del sitio quirúrgico (45 %), seguidos de los seromas (24.9 %), hematoma (15.6 %) y la dehiscencia (14.6 %). (3)
Las heridas quirúrgicas son interrupciones controladas de la integridad de la piel y los tejidos subyacentes, resultantes de incisiones realizadas durante intervenciones quirúrgicas. (3) Estas heridas, aunque sean procedimientos controlados y precisos, están expuestas a complicaciones postoperatorias como infecciones del sitio quirúrgico (ISQ), seromas, hematomas y dehiscencias, pueden tener un impacto clínico significativo, prolongando el tiempo de hospitalización y aumentando la necesidad de intervenciones adicionales. (4)
La clasificación de las heridas quirúrgicas se basa en el grado de contaminación, dividiéndose en limpias, limpias-contaminadas, contaminadas y sucias, influyen en el riesgo de complicaciones y, por ende, en el enfoque terapéutico requerido. (4, 5)
En este contexto, la terapia de presión negativa (TPN) surgió como una alternativa avanzada y eficaz en el manejo de heridas quirúrgicas. Implementada en 1997 por los doctores Argenta y Morykwas, (6) la TPN se basa en la aplicación de presión subatmosférica controlada para acelerar la cicatrización. Este enfoque promueve la eliminación de exudados, reduce el edema, estimula la angiogénesis y facilita la formación de tejido de granulación. (6)
El sistema de TPN consiste en una esponja porosa, habitualmente de poliuretano, que se coloca dentro de la cavidad de la herida, cubierta con un vendaje oclusivo conectado a un dispositivo de succión, creando un ambiente ideal para la cicatrización y disminuyendo la carga bacteriana. (5- 7)
La TPN fue introducida como una alternativa a los métodos convencionales de cuidado de heridas, como los apósitos húmedos y secos, y ha demostrado ser eficaz en la reducción de complicaciones posquirúrgicas. Esta técnica promueve una cicatrización más rápida y mejora los resultados clínicos, lo que ha sido respaldado por estudios clínicos randomizados, estudios observacionales y metaanálisis. (7)
Los beneficios de la TPN se han documentado en diversos tipos de heridas quirúrgicas, incluyendo heridas de cirugía abdominal, ortopédica, plástica y reconstructiva, así como en cesáreas y cirugías ginecológicas.
Considerando la importancia de minimizar las complicaciones posquirúrgicas y su impacto en el paciente y en los sistemas de salud, este estudio de revisión sistemática tuvo como objetivo profundizar en la eficacia de la terapia de presión negativa en la reducción de complicaciones postoperatorias, con un enfoque en su efectividad para mejorar los resultados clínicos en diferentes contextos quirúrgicos.
Metodología
El estudio se basó en una revisión sistemática siguiendo las directrices PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses). La investigación buscó analizar la eficacia de la terapia de presión negativa (TPN) en la reducción de complicaciones de heridas posquirúrgicas, estructurada en formato PICOT: ¿En pacientes sometidos a cirugía, la aplicación de la terapia de presión negativa comparada con el manejo convencional de heridas quirúrgicas reduce las complicaciones postoperatorias, según lo reportado en primarios cuantitativos (descriptivos, de casos y controles), estudios de caso, revisiones sistemáticas y metaanálisis publicados entre 2017 y 2024?
Para la ejecución de esta investigación se emplearon artículos científicos, trabajos de investigación que se encuentran en varias bases de datos académicas y científicas, incluyendo PubMed, Scopus, Web of Science, SciELO, Redalyc, Dialnet, Medigraphic, Ciberindex. La estrategia de búsqueda incluyó palabras clave y tesauros del Medical Subject Headings (MeSH) y Descriptores de Ciencias de la Salud (DeSC), los cuales se combinaron mediante operadores booleanos (AND, OR) para optimizar la precisión y relevancia de los resultados obtenidos.
Se estableció como rango temporal de búsqueda el período comprendido entre 2017 y 2024, considerando que la TPN en el contexto de complicaciones de heridas posquirúrgicas es una línea de investigación emergente y con literatura aún limitada, encontrando evidencia relevante y de alta calidad a partir del año 2017, la cual aporta significativamente al desarrollo del presente artículo científico. Los artículos seleccionados fueron en idioma español, inglés y portugués.
En la Tabla 1 se presenta la estrategia de búsqueda.
Tabla 1: Estrategia de búsqueda
La calidad metodológica de los estudios incluidos fue evaluada mediante las listas de verificación del programa CASPe, seleccionando el formato según el tipo de estudio. Este instrumento permitió identificar fortalezas y debilidades en aspectos como la validez interna, los objetivos, el diseño y la aplicabilidad de los resultados. Complementariamente, se aplicó el sistema GRADE (Grading of Recommendations, Assessment, Development and Evaluation) para calificar el nivel de certeza de la evidencia, considerando el riesgo de sesgo, la consistencia, precisión, y aplicabilidad de los hallazgos.
Además, se utilizó el SCImago Journal Rank (SJR) para clasificar el impacto de las revistas científicas, sin sustituir la evaluación crítica del contenido. En los estudios clínicos aleatorizados se empleó también la escala de riesgo de sesgo de Cochrane. (8)
El proceso de búsqueda y selección de información se estructuró siguiendo la guía PRISMA, y se desarrolló en tres etapas: revisión de bases de datos, aplicación de criterios de inclusión y exclusión, y lectura crítica mediante CASPe y GRADE, permitiendo una interpretación rigurosa de los estudios en función de la pregunta de investigación.
Para organizar adecuadamente la información se consideró cada uno de los documentos utilizados en la revisión sistemática, para ello se consideró el uso de programas como el gestor bibliográfico Zotero, así también las herramientas de Office como Excel y Word lo que permitió organizar la información mediante tablas de esta manera se pudo clasificar cada uno de los artículos. Además, permitió seleccionar los artículos que brinden información adecuada y excluir los que no correspondan a los objetivos planteados.
El presente artículo consideró fundamental respetar los derechos de autor y atribuir correctamente las fuentes de la información utilizada en el artículo de revisión, al seleccionar los estudios que serán incluidos en la revisión; es fundamental evitar el sesgo de selección y asegurar que la elección de los estudios se realice de manera objetiva y basada en los siguientes criterios.
Selección de estudios
Los estudios registrados se sometieron a un proceso de selección en forma progresiva que se basó en: tasas de complicaciones posquirúrgicas, eficacia de la TPN frente a métodos convencionales, factores que influyen en los resultados clínicos (por ejemplo: tipo de cirugía o características de los pacientes).
Resultados
Posterior a la revisión con las especificaciones antes mencionadas en la metodología, se identificaron 48 publicaciones, quedando 18 artículos que cumplían con los criterios de inclusión para ser leídos; excluyéndose 30 publicaciones, de ellos 9 sin acceso gratuito, 16 que no coincidían con la información deseada, y 5 duplicados.
Finalmente, se incluyeron 18 artículos en la presente revisión. Del análisis metodológico se identificó que 6 de los artículos corresponden a estudios observacionales de tipo descriptivo (33.3 %), los cuales reportan experiencias clínicas y resultados preliminares sobre la aplicación de la TPN. Asimismo, se encontraron 6 estudios de caso o casos clínicos (33.3 %), que exploraron la evolución individual de pacientes tratados con TPN en contextos específicos. Se identificaron 2 estudios de análisis de costos: uno a partir de una revisión bibliográfica y otro basado en un caso clínico (11.1 %). También se incluyeron 2 revisiones sistemáticas narrativas (11.1 %) y 1 revisión sistemática (5.5 %), las cuales integraron evidencia secundaria sobre la efectividad de la TPN. Finalmente, se halló 1 estudio retrospectivo de tipo caso y control (5.5 %) que comparó la TPN con métodos convencionales. Esta diversidad metodológica aportó una perspectiva amplia y complementaria sobre la eficacia y aplicabilidad de la TPN en diferentes escenarios clínicos.
Figura 1: Diagrama de flujo que describe el proceso de búsqueda, identificación, cribado, elegibilidad, incluidos upara el análisis de resultados.
Los 18 artículos seleccionados para
esta revisión sistemática fueron publicados entre 2017 y 2024, y abordan
directamente el uso de la terapia de presión negativa en heridas
posquirúrgicas. En su mayoría, se trata de estudios cuantitativos, con
predominancia de enfoques descriptivos, estudios de caso y revisiones
sistemáticas, publicados en idiomas español, inglés y portugués (estos últimos
traducidos al español para su análisis).
Para garantizar la calidad de la evidencia, los 18 artículos fueron evaluados
mediante el SCImago Journal Rank (SJR), una medida de clasificación que
establece el impacto de las publicaciones científicas agrupándolas en cuartiles
según el número de citas y la relevancia del medio en el que fueron publicadas.
(9) Estos resultados se muestran en la Tabla 2.
Tabla 2: Evaluación de la calidad de los artículos seleccionados con SJR (SCImago Journal Rank) y CASPe (Critical Appraisal Skills Programme)
Para el proceso de extracción de datos, se utilizó un enfoque organizado mediante la creación de una tabla que incluye diversos indicadores para clasificar los artículos revisados. Estos indicadores abarcan: autor/es, año de publicación, título del artículo, país, base de datos, tipo de estudio, nivel de evidencia y hallazgos. Esta clasificación detallada de los artículos posibilitó la agrupación, comparación y posterior redacción del artículo de revisión sistemática. La estructuración de la información de esta manera facilitó la síntesis coherente de los resultados y contribuyó a la presentación ordenada de la revisión sistemática.
Tabla 3: Clasificación por autor, año, título, país, base de datos, tipo de estudio y hallazgos
Discusión
Los resultados de esta revisión confirman la eficacia de la terapia de presión negativa como una intervención relevante para la reducción de complicaciones en heridas posquirúrgicas, especialmente en pacientes con comorbilidades o sometidos a procedimientos de alto riesgo. A diferencia de métodos convencionales, la TPN no solo optimiza el proceso de cicatrización, sino que también parece modificar el curso clínico de la recuperación al disminuir significativamente las tasas de infección, seroma y dehiscencia. (5, 6, 7)
Este efecto ha sido evidenciado en múltiples contextos quirúrgicos. En cirugía colorrectal, por ejemplo, se ha observado una clara disminución del tiempo de hospitalización y de la incidencia de infecciones en comparación con apósitos convencionales. (5) Asimismo, en la cirugía de la pared abdominal, la TPN ha demostrado ser especialmente útil en pacientes con factores de riesgo como obesidad, diabetes o inmunosupresión, donde acelera la formación de tejido de granulación y reduce el tamaño de la herida. (6) Estos hallazgos apoyan la hipótesis de que la TPN no debe ser considerada una medida exclusivamente curativa, sino una estrategia profiláctica de amplio impacto clínico.
Desde un punto de vista fisiopatológico, la TPN favorece la cicatrización a través de la modulación de la presión local, el incremento del flujo sanguíneo y la reducción del exudado, generando un ambiente propicio para la regeneración tisular. Esta sinergia de mecanismos fisiológicos justifica su efectividad en escenarios clínicos complejos como enfisema subcutáneo, neumomediastino (3) o úlceras vasculares profundas, (14) en los cuales los métodos tradicionales no logran el mismo nivel de control ni de progresión terapéutica.
No obstante, la implementación indiscriminada de la TPN en todos los pacientes quirúrgicos podría no estar justificada. La evidencia revisada sugiere que los mayores beneficios se concentran en pacientes de alto riesgo o con heridas complejas. En cambio, en casos de bajo riesgo o heridas superficiales, algunos autores como Norman et al. (10) y Fuentes et al. (20) no han encontrado diferencias significativas en comparación con métodos convencionales, lo que subraya la necesidad de establecer criterios clínicos bien definidos para su indicación.
Estos hallazgos consolidan la TPN como una intervención clínica efectiva, resaltando su utilidad en diversas aplicaciones quirúrgicas y en la mejora de la cicatrización en pacientes con factores de riesgo. Los estudios revisados, clasificados en cuartiles (Q1 y Q4), aportan evidencia robusta para respaldar el uso de esta terapia en un entorno hospitalario de alta complejidad, sugiriendo que su implementación puede mejorar significativamente los resultados clínicos y reducir las complicaciones en pacientes postoperados. (11, 20)
En cuanto a la seguridad y posibles efectos adversos, mientras la mayoría de los estudios revisados destacan los beneficios de la TPN en la reducción de infecciones, algunos artículos reportan efectos secundarios leves como irritación de la piel y, en raras ocasiones, necrosis de los bordes de la herida debido a la presión prolongada, como lo describe Andrade-Alegre et al. (15) Además, un estudio realizado por Santana-Romero et al. (11) reporta una tasa de eventos adversos del 5 %, lo cual resalta la importancia de una monitorización adecuada en pacientes con piel frágil o en áreas de difícil acceso. Esta variabilidad en los resultados sugiere que la eficacia y seguridad de la TPN pueden depender en gran medida de la correcta aplicación del protocolo y de factores individuales del paciente, como el tipo de piel y las comorbilidades presentes. (12, 13)
Al comparar estos hallazgos con revisiones previas, se evidencia que estudios como los de Quilindo-Giraldo et al. (12) y García-Montero et al. (14) han encontrado resultados positivos en términos de reducción de complicaciones, pero enfatizan que el costo de la TPN sigue siendo una limitante para su implementación en todos los pacientes postquirúrgicos. El estudio de Quilindo-Giraldo et al. (12) indica que, aunque la TPN es efectiva, su relación costo-beneficio es más favorable en heridas profundas y en pacientes con comorbilidades, mientras que en heridas menos complejas los beneficios no justifican los costos elevados, lo que es consistente con las observaciones de Castro Oliveira et al. (13) Por otro lado, Pontillo-Walerovsky et al. (16) encontraron que en combinación con agentes tópicos, como la miel, la TPN mejora los resultados, lo cual abre la puerta a futuras investigaciones sobre tratamientos combinados que puedan reducir costos sin sacrificar la eficacia. (17)
Las limitaciones de esta revisión incluyen la heterogeneidad en los diseños y protocolos de los estudios analizados. Muchos presentan variaciones en la duración del tratamiento con TPN y en los criterios de evaluación de la cicatrización y complicaciones, lo que dificulta una comparación directa de los resultados. (18, 19) Además, la mayoría de las investigaciones se han realizado en centros de salud especializados, lo que limita la generalización de los resultados a otros contextos. La falta de estudios de seguimiento a largo plazo también representa una limitante importante, ya que no se conoce el impacto de la TPN en la calidad de vida y en la cicatrización duradera de los pacientes. (21-, 22, 23)
A partir de estos hallazgos, es posible afirmar que la TPN representa una herramienta terapéutica valiosa que debería ser considerada como una intervención de primera línea para el manejo de heridas postoperatorias en pacientes de alto riesgo. Su uso selectivo, basado en criterios clínicos precisos, puede no solo mejorar los resultados quirúrgicos, sino también optimizar el uso de recursos en instituciones de salud. En cambio, en poblaciones de bajo riesgo, su implementación debe evaluarse con cautela, priorizando intervenciones más costo-efectivas. (24)
Asimismo, sería beneficioso investigar la combinación de TPN con agentes antimicrobianos tópicos, como propone Sánchez, (21) para potencialmente mejorar los resultados clínicos y reducir costos. La implementación de protocolos estandarizados de TPN en hospitales podría optimizar la práctica clínica y permitir una evaluación más precisa de sus beneficios y limitaciones en el tratamiento de heridas posquirúrgicas.
Conclusiones
La terapia de presión negativa se establece como una intervención eficaz en la reducción de complicaciones posquirúrgicas, con resultados que respaldan su superioridad frente a métodos convencionales en pacientes con heridas complejas y factores de riesgo significativos, como obesidad, diabetes y comorbilidades severas. (24) A través de esta revisión, se determinó que la TPN disminuye de manera consistente las tasas de infecciones y dehiscencias, al tiempo que acelera la cicatrización mediante mecanismos como el aumento del flujo sanguíneo, la formación de tejido de granulación y el manejo eficiente de exudados. Su aplicación ha demostrado ser particularmente beneficiosa en cirugías abdominales, colorrectales y torácicas, así como en el tratamiento de úlceras vasculares e infecciones avanzadas. (25)
El éxito de la TPN está influido por factores como el tipo de cirugía, localización de la herida y características del paciente, la terapia destaca su efectividad en pacientes de alto riesgo, mientras que en heridas superficiales o en pacientes de bajo riesgo, su eficacia es comparable a los métodos convencionales.
Asimismo, factores como la correcta aplicación del dispositivo y la capacitación del personal sanitario son esenciales para optimizar los resultados, subrayando la importancia de protocolos estandarizados y formación continua. A pesar de sus beneficios, la TPN presenta limitaciones, como efectos adversos leves, incluyendo irritación cutánea y molestias locales, lo que resalta la necesidad de una evaluación cuidadosa para maximizar su seguridad y eficacia.
La TPN representa una herramienta clínica valiosa en el manejo de heridas quirúrgicas, especialmente en pacientes vulnerables y situaciones de alta complejidad. No obstante, futuras investigaciones de mayor alcance y rigor metodológico, así como análisis costo-efectividad, son necesarias para consolidar su implementación basada en evidencia en diversos entornos médicos y ampliar su uso en poblaciones específicas.
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Cómo citar: Guaraca Pumacuro GA, Chisag Guamán MM. Eficacia de la terapia de presión negativa en la reducción de complicaciones de heridas posquirúrgicas: una revisión sistemática. Enfermería: Cuidados Humanizados. 2025;14(1):e4428. doi: 10.22235/ech.v14i1.4428
Contribución de los autores (Taxonomía CRediT): 1. Conceptualización; 2. Curación de datos; 3. Análisis formal; 4. Adquisición de fondos; 5. Investigación; 6. Metodología; 7. Administración de proyecto; 8. Recursos; 9. Software; 10. Supervisión; 11. Validación; 12. Visualización; 13. Redacción: borrador original; 14. Redacción: revisión y edición.
G. A. G. P. ha contribuido en 1, 2, 3, 4, 5, 6, 8, 9, 13, 14; M. M. C. G. en 1, 2, 3, 5, 6, 7, 10, 11, 12, 13, 14.
Editora científica responsable: Dra. Natalie Figueredo
Enfermería: Cuidados Humanizados, v14(1)
enero-junio 2025
10.22235/ech.v14i1.4428
Enfermería: Cuidados Humanizados, v14(1)
January-June 2025
10.22235/ech.v14i1.4428
Original articles
Effectiveness of Negative Pressure Wound Therapy in Reducing Postoperative Complications: A Systematic Review
Eficacia de la terapia de presión negativa en la reducción de complicaciones de heridas posquirúrgicas: una revisión sistemática
Eficácia da terapia por pressão negativa na redução de complicações de feridas pós-operatórias: uma revisão sistemática
Gabriela Aracelly Guaraca Pumacuro1 ORCID:
0000-0003-0696-3708
María Marlene Chisag Guamán2 ORCID: 0000-0002-0481-2378
1 Universidad Técnica de Ambato, Ecuador
2 Universidad Técnica de Ambato, Ecuador, mm.chisag@uta.edu.ec
Abstract:
Introduction: Postoperative wound complications,
such as infections, seromas, and dehiscence, represent a global health
challenge. Negative Pressure Wound Therapy (NPWT) is an advanced technique that
accelerates wound healing through the application of controlled subatmospheric
pressure, reducing the risk of infection and promoting tissue regeneration.
Objective: To analyze the effectiveness of NPWT in reducing
postoperative complications and improving clinical outcomes in various surgical
contexts.
Methodology: A systematized review was conducted following the PRISMA
guidelines. The following databases were consulted: PubMed, Scopus, Web of
Science, SciELO, LILACS, Redalyc, Dialnet, ScienceDirect, Medigraphic and
Ciberindex. DeCS and MeSH descriptors were used, including: “negative pressure
wound therapy,” “wound healing,” “surgical wound infection,” and “postoperative
complications,” along with their Spanish equivalents, combined using Boolean
operators AND and OR. Studies published between 2017 and 2024 in English,
Spanish, and Portuguese were included.
Results: The reviewed studies demonstrated that NPWT significantly
reduces the incidence of infections (by approximately 35 % compared to
conventional methods) and dehiscence (by 30-40 %). Key success factors include
wound location, type of surgery, and individual patient characteristics such as
obesity, diabetes, and advanced age.
Conclusions: The evidence suggests that NPWT is an effective
intervention for reducing postoperative complications —particularly infections
and dehiscence— in patients with complex wounds and comorbidities. The studies
report consistent improvements in healing time and clinical outcomes,
especially in high-risk surgical procedures.
Keywords: negative pressure wound therapy; postoperative complications; wound healing; surgical wound; surgical wound infection.
Resumen:
Introducción: Las complicaciones en heridas
postquirúrgicas, como infecciones, seromas y dehiscencias, representan un
desafío global en salud. La terapia de presión negativa (TPN) es una técnica
avanzada que acelera la cicatrización mediante presión subatmosférica
controlada, reduciendo el riesgo de infecciones y promoviendo la regeneración
tisular.
Objetivo: Profundizar en la eficacia de la TPN en la reducción de
complicaciones posoperatorias y mejorar los resultados clínicos en diversos
contextos quirúrgicos.
Metodología: Se realizó una revisión sistemática basada en la guía
PRISMA. Se consultaron las bases de datos PubMed, Scopus, Web of Science,
SciELO, LILACS, Redalyc, Dialnet, ScienceDirect, Medigraphic y Ciberindex. Se
utilizaron descriptores DeCS y MeSH como: “negative pressure wound therapy”,
“wound healing”, “surgical wound infection”, “postoperative complications” y sus
equivalentes en español, combinados mediante operadores booleanos AND y OR. Se
incluyeron estudios publicados entre 2017 y 2024, en inglés, español y
portugués.
Resultados: Los artículos analizados evidenciaron que la TPN reduce
significativamente la incidencia de infecciones (35 % en comparación con
métodos convencionales) y dehiscencias (30-40 % menos). Los factores
determinantes para el éxito de la TPN incluyen la localización, el tipo de
cirugía y características individuales como obesidad, diabetes y edad avanzada.
Conclusiones: La evidencia indica que la TPN es una intervención eficaz
para reducir complicaciones posquirúrgicas, especialmente infecciones y
dehiscencias, en pacientes con heridas complejas y comorbilidades. Los estudios
muestran mejoras consistentes en los tiempos de cicatrización y en los
desenlaces clínicos en cirugías de alto riesgo.
Palabras clave: terapia de presión negativa para heridas; complicaciones posoperatorias; cicatrización de heridas; herida quirúrgica; infección de la herida quirúrgica.
Resumo:
Introdução: As complicações em feridas
pós-operatórias, como infecções, seromas e deiscências, representam um desafio
global em saúde. A terapia por pressão negativa (TPN) é uma técnica avançada
que acelera a cicatrização por meio de pressão subatmosférica controlada,
reduzindo o risco de infecções e promovendo a regeneração tecidual.
Objetivo: Aprofundar na eficácia da TPN na redução de complicações
pós-operatórias e melhorar os resultados clínicos em diversos contextos
cirúrgicos.
Metodologia: Foi realizada uma revisão sistematizada com base nas
diretrizes do PRISMA. Foram consultadas as bases de dados: PubMed, Scopus, Web
of Science, SciELO, LILACS, Redalyc, Dialnet, ScienceDirect, Medigraphic e
Ciberindex. Utilizaram-se descritores DeCS e MeSH como: “negative pressure
wound therapy”, “wound healing”, “surgical wound infection”, “postoperative
complications” e seus equivalentes em espanhol, combinados por meio de
operadores booleanos AND e OR. Foram incluídos estudos publicados entre 2017 e
2024, em inglês, espanhol e português.
Resultados: Os artigos analisados evidenciaram que a TPN reduz significativamente
a incidência de infecções (35% em comparação com métodos convencionais) e
deiscências (30–40% a menos). Os fatores determinantes para o sucesso da TPN
incluem localização, tipo de cirurgia e características individuais como
obesidade, diabetes e idade avançada.
Conclusões: As evidências indicam que a TPN é uma intervenção eficaz
para reduzir complicações pós-operatórias, especialmente infecções e
deiscências, em pacientes com feridas complexas e comorbidades. Os estudos
mostram melhorias consistentes nos tempos de cicatrização e nos desfechos
clínicos em cirurgias de alto risco.
Palavras-chave: terapia por pressão negativa para feridas; complicações pós-operatórias; cicatrização de feridas; ferida cirúrgica; infecção da ferida cirúrgica.
Received: 26/12/2024
Accepted: 28/04/2025
Introduction
The incidence of postoperative wound complications is a global concern in the healthcare field. According to data from the World Health Organization (WHO), approximately 11 % of surgical procedures in developed countries result in surgical site infections (SSIs). (1) In Latin America, the prevalence of SSIs may be even higher, with reported rates reaching up to 11.2 % in some regions, particularly in low- and middle-income countries. (2) A quantitative observational study conducted in a hospital-clinic in Guayaquil, Ecuador, with a sample of 19 patients, identified the most frequent postoperative complications, among which surgical site infection (45 %) was the most common, followed by seromas (24.9 %), hematomas (15.6 %), and dehiscence (14.6 %). (3)
Surgical wounds are controlled disruptions of the integrity of the skin and underlying tissues resulting from incisions made during surgical procedures. (3) Although these wounds are the result of precise and controlled actions, they are still exposed to postoperative complications such as SSIs, seromas, hematomas, and dehiscence, which can have significant clinical consequences, including prolonged hospital stays and the need for additional interventions. (4) The classification of surgical wounds is based on the degree of contamination, being categorized as clean, clean-contaminated, contaminated, and dirty. This classification influences the risk of complications and, consequently, the therapeutic approach required. (4, 5)
In this context, Negative Pressure Wound Therapy (NPWT) emerged as an advanced and effective alternative for managing surgical wounds. Introduced in 1997 by Drs. Argenta and Morykwas, (6) NPWT is based on the application of controlled subatmospheric pressure to accelerate wound healing. This approach promotes the removal of exudate, reduces edema, stimulates angiogenesis, and facilitates the formation of granulation tissue. (6) The NPWT system consists of a porous sponge, usually made of polyurethane, placed inside the wound cavity, covered with an occlusive dressing connected to a suction device. This creates an ideal environment for healing and reduces bacterial load. (5- 7)
NPWT was introduced as an alternative to conventional wound care methods such as wet-to-dry dressings and has proven effective in reducing postoperative complications. It promotes faster healing and improves clinical outcomes, as supported by randomized clinical trials, observational studies, and meta-analyses. (7) The benefits of NPWT have been documented in various types of surgical wounds, including abdominal, orthopedic, plastic, and reconstructive surgeries, as well as cesarean sections and gynecological procedures.
Considering the importance of minimizing postoperative complications and their impact on both patients and healthcare systems, this systematized review aimed to analyze the effectiveness of NPWT in reducing postoperative complications, with a focus on improving clinical outcomes across different surgical contexts.
Methodology
This study was based on a systematic review following the PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses) guidelines. The research aimed to analyze the effectiveness of Negative Pressure Wound Therapy (NPWT) in reducing postoperative wound complications, structured under the PICOT format: In patients undergoing surgery, does the application of negative pressure wound therapy compared to conventional surgical wound management reduce postoperative complications, as reported in primary quantitative studies (descriptive, case-control), case reports, systematic reviews, and meta-analyses published between 2017 and 2024?
Scientific articles and research papers were retrieved from various academic and scientific databases, including PubMed, Scopus, Web of Science, SciELO, Redalyc, Dialnet, Medigraphic, and Ciberindex. The search strategy included keywords and thesauri from Medical Subject Headings (MeSH) and Health Sciences Descriptors (DeCS), which were combined using Boolean operators (AND, OR) to optimize the accuracy and relevance of the results.
The search was limited to the period from 2017 to 2024, given that the application of NPWT in the context of postoperative wound complications is an emerging line of research, with significant and high-quality evidence becoming available starting in 2017. Articles were selected in Spanish, English, and Portuguese.
Table 1 presents the search strategy.
Table 1: Search strategy
The methodological quality of the included studies was evaluated using the CASPe (Critical Appraisal Skills Programme) checklists, selecting the format according to the type of study. This tool allowed identification of strengths and weaknesses regarding internal validity, objectives, design, and applicability of results. Additionally, the GRADE system (Grading of Recommendations, Assessment, Development and Evaluation) was applied to assess the certainty of evidence, considering risk of bias, consistency, precision, and applicability of findings.
The SCImago Journal Rank (SJR) was used to assess the impact of scientific journals, without replacing critical appraisal of content. In randomized clinical trials, the Cochrane risk-of-bias tool was also applied. (8)
The information retrieval and selection process followed PRISMA guidelines and included three stages: database review, application of inclusion and exclusion criteria, and critical appraisal using CASPe and GRADE, allowing rigorous interpretation of the studies in response to the research question.
To ensure proper data organization, tools such as Zotero, Excel, and Microsoft Word were used to classify the studies in tables. This facilitated the selection of relevant articles and the exclusion of those not aligned with the study objectives.
This article emphasized adherence to copyright regulations and proper source attribution. During the study selection process, measures were taken to avoid selection bias, ensuring that the inclusion of studies was objective and based on predefined criteria.
Study selection
The studies underwent a progressive selection process based on: rates of postoperative complications, effectiveness of NPWT compared to conventional methods, and clinical outcome influencers (e.g., type of surgery or patient characteristics).
Results
Following the systematized review according to the specifications described in the methodology, 48 publications were initially identified. Of these, 18 articles met the inclusion criteria for full reading; 30 publications were excluded, including 9 due to lack of free access, 16 that were not relevant to the research objective, and 5 duplicates.
Ultimately, 18 articles were included in this systematized review. Methodological analysis revealed that 6 of the articles were observational descriptive studies (33.3 %), which reported clinical experiences and preliminary results regarding the application of Negative Pressure Wound Therapy. Additionally, 6 case studies (33.3 %) explored the individual progress of patients treated with NPWT in specific clinical settings. Two cost-analysis studies were identified: one based on a literature review and another on a clinical case (11.1 %). Furthermore, two narrative systematic reviews (11.1 %) and one systematized review (5.5 %) were included, which synthesized secondary evidence on NPWT effectiveness. Finally, one retrospective case-control study (5.5 %) was found, comparing NPWT to conventional methods. This methodological diversity provided a broad and complementary perspective on the effectiveness and applicability of NPWT in different clinical scenarios.
Figure 1: Flow diagram describing the process of search, identification, screening, eligibility, and inclusion of studies for results analysis.
The 18 articles selected for this systematized review were published between 2017 and 2024 and directly address the use of Negative Pressure Wound Therapy in postoperative wounds. The majority are quantitative studies, with a predominance of descriptive approaches, case reports, and systematic reviews, published in Spanish, English, and Portuguese (the latter translated into Spanish for analysis). To ensure the quality of the evidence, the 18 articles were evaluated using the SCImago Journal Rank (SJR), a ranking metric that assesses the impact of scientific publications by grouping them into quartiles based on the number of citations and the relevance of the journal in which they were published. (9) These results are presented in Table 2.
Table 2: Quality assessment of selected articles using SCImago Journal Rank (SJR) and Critical Appraisal Skills Programme (CASPe)
For the data extraction process, an organized approach was employed through the development of a table encompassing various indicators to classify the reviewed articles. These indicators include author(s), year of publication, article title, country, database, study type, level of evidence, and findings. This detailed classification enabled the grouping, comparison, and subsequent drafting of the systematic review article. Structuring the information in this manner facilitated a coherent synthesis of the results and contributed to the orderly presentation of the systematic review.
Table 3: Classification by author, year, title, country, database, study type, and findings
Discussion
The results of this systematic review confirm the effectiveness of Negative Pressure Wound Therapy as a relevant intervention for reducing complications in postoperative wounds, especially in patients with comorbidities or those undergoing high-risk procedures. Unlike conventional methods, NPWT not only optimizes the healing process but also appears to alter the clinical course of recovery by significantly decreasing rates of infection, seroma, and dehiscence. (5, 6, 7)
This effect has been observed across multiple surgical contexts. In colorectal surgery, for instance, a clear reduction in hospital stays and infection rates has been documented compared to conventional dressings. (5) Likewise, in abdominal wall surgery, NPWT has proven especially beneficial for patients with risk factors such as obesity, diabetes, or immunosuppression, where it accelerates granulation tissue formation and reduces wound size. (6) These findings support the hypothesis that NPWT should not be considered solely as a curative measure, but as a prophylactic strategy with broad clinical impact.
From a pathophysiological standpoint, NPWT promotes healing through modulation of local pressure, increased blood flow, and reduction of exudate, creating an optimal environment for tissue regeneration. This synergy of physiological mechanisms justifies its effectiveness in complex clinical scenarios such as subcutaneous emphysema, pneumomediastinum, (3) or deep vascular ulcers, (14) where traditional methods fail to achieve the same level of therapeutic progression or control.
However, indiscriminate implementation of NPWT in all surgical patients may not be justified. The reviewed evidence suggests that the greatest benefits are observed in high-risk patients or those with complex wounds. Conversely, in low-risk cases or superficial wounds, some authors such as Norman et al. (10) and Fuentes et al. (20) have found no significant differences compared to conventional methods, highlighting the need to establish well-defined clinical criteria for its indication.
These findings reinforce NPWT as an effective clinical intervention, highlighting its utility in various surgical applications and in enhancing healing in patients with risk factors. The reviewed studies, classified within quartiles Q1 and Q4, provide robust evidence supporting the use of this therapy in high-complexity hospital settings, suggesting that its implementation can significantly improve clinical outcomes and reduce complications in postoperative patients. (11, 20)
Regarding safety and potential adverse effects, while most studies highlight the benefits of NPWT in reducing infections, some reports mention mild side effects such as skin irritation and, in rare cases, wound edge necrosis due to prolonged pressure, as described by Andrade-Alegre et al. (15) Additionally, a study conducted by Santana-Romero et al. (11) reports a 5% adverse event rate, emphasizing the importance of proper monitoring in patients with fragile skin or in anatomically challenging areas. This variability in outcomes suggests that the efficacy and safety of NPWT may largely depend on proper protocol application and individual patient factors such as skin type and existing comorbidities. (12, 13)
When comparing these findings with previous reviews, studies such as those by Quilindo-Giraldo et al. (12) and García-Montero et al. (14) have reported positive outcomes in terms of complication reduction but emphasize that the cost of NPWT remains a barrier to widespread implementation in all postoperative patients. Quilindo-Giraldo et al. (12) note that while NPT is effective, its cost-benefit ratio is more favorable in deep wounds and patients with comorbidities, whereas in less complex wounds the benefits do not justify the high costs—an observation consistent with that of Castro Oliveira et al. (13) Meanwhile, Pontillo-Walerovsky et al. (16) found that when combined with topical agents such as honey, NPWT improves outcomes, opening the door to future research on combined treatments that may reduce costs without sacrificing effectiveness. (17)
The limitations of this review include heterogeneity in the study designs and protocols analyzed. Many studies show variations in the duration of NPWT application and in the criteria used to evaluate healing and complications, which hinders direct comparison of results. (18, 19) Furthermore, most investigations have been conducted in specialized healthcare centers, limiting the generalizability of results to other settings. The lack of long-term follow-up studies also represents a significant limitation, as the long-term impact of NPWT on quality of life and sustained healing remains unknown. (21, 22, 23)
Based on these findings, it can be stated that NPWT represents a valuable therapeutic tool that should be considered a first-line intervention for managing postoperative wounds in high-risk patients. Its selective use, based on precise clinical criteria, can not only improve surgical outcomes but also optimize resource utilization in healthcare institutions. In contrast, its use in low-risk populations should be assessed with caution, prioritizing more cost-effective interventions. (24)
Moreover, it would be beneficial to investigate the combination of NPWT with topical antimicrobial agents, as proposed by Sánchez, (21) to potentially enhance clinical outcomes and reduce costs. The implementation of standardized NPWT protocols in hospitals could optimize clinical practice and allow for a more accurate evaluation of its benefits and limitations in the treatment of postoperative wounds.
Conclusions
Negative Pressure Wound Therapy (NPWT) is established as an effective intervention in reducing postoperative complications, with results supporting its superiority over conventional methods in patients with complex wounds and significant risk factors such as obesity, diabetes, and severe comorbidities. (24) Through this systematic review, it was determined that NPWT consistently decreases rates of infections and dehiscence, while accelerating wound healing through mechanisms such as increased blood flow, granulation tissue formation, and efficient exudate management. Its application has proven particularly beneficial in abdominal, colorectal, and thoracic surgeries, as well as in the treatment of vascular ulcers and advanced infections. (25)
The success of NPWT is influenced by factors such as the type of surgery, wound location, and patient characteristics. The therapy demonstrates high effectiveness in high-risk patients, while in superficial wounds or low-risk individuals, its efficacy appears comparable to that of conventional methods.
Additionally, factors such as proper device application and adequate training of healthcare personnel are essential to optimize outcomes, highlighting the importance of standardized protocols and ongoing professional education. Despite its benefits, NPWT presents certain limitations, including mild adverse effects such as skin irritation and local discomfort, emphasizing the need for careful evaluation to ensure maximum safety and effectiveness.
NPWT represents a valuable clinical tool in the management of surgical wounds, particularly in vulnerable patients and high-complexity settings. However, further large-scale studies with greater methodological rigor, as well as cost-effectiveness analyses, are needed to support its evidence-based implementation across diverse medical environments and to expand its use in specific populations.
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Authors’ contribution (CRediT Taxonomy): 1. Conceptualization; 2. Data curation; 3. Formal Analysis; 4. Funding acquisition; 5. Investigation; 6. Methodology; 7. Project administration; 8. Resources; 9. Software; 10. Supervision; 11. Validation; 12. Visualization; 13. Writing: original draft; 14. Writing: review & editing.
G. A. G. P. has contributed in 1, 2, 3, 4, 5, 6, 8, 9, 13, 14; M. M. C. G. in 1, 2, 3, 5, 6, 7, 10, 11, 12, 13, 14.
Scientific editor in charge: Dr. Natalie Figueredo.
Enfermería: Cuidados Humanizados, v14(1)
January-June 2025
10.22235/ech.v14i1.4428